Un proverbio chino dice:
“Si quieres ser feliz un día, emborráchate.
Si quieres ser feliz un mes, cásate.
Si quieres ser feliz toda la vida, hazte jardinero”
henandhammock.co.uk |
Un proverbio chino dice:
“Si quieres ser feliz un día, emborráchate.
Si quieres ser feliz un mes, cásate.
Si quieres ser feliz toda la vida, hazte jardinero”
No sé si será totalmente cierto pero estoy de acuerdo con él en cuanto a que las plantas son parte de mi felicidad diaria. No puedo evitar traerme alguna cuando la veo maltratada en algún centro comercial; cuando me regalan una es inmediatamente bautizada como símbolo de que ha entrado en mi familia; o cuando he vivido fuera de mi casa, he necesitado tener alguna a quien cuidar (todavía me veo a mí misma, volviendo de mi Erasmus, cruzando el arco detector de metales del Charles de Gaulle con mi kentia en brazos…)
Aunque no seas tan enamoradizo como yo, te contaré varios motivos (estéticos, psicológicos y preventivos) por los que debes incorporar las plantas a tu vida y a tu hogar.
Mejoran la calidad del aire que respiras. La fotosíntesis es un proceso vital mediante el cual el dióxido de carbono se absorbe, se transforma en oxígeno y es expulsado al exterior, renovando y mejorando la calidad del aire. Su ciclo se lleva a cabo por la mañana, aprovechando la luz solar, aunque existen otros grupos de plantas (como las orquídeas y bromeliáceas) que pueden tomar el CO2 por la noche y cerrar los estomas durante el día, evitando así la pérdida de agua por evaporación. Puede ser interesante combinar ambos tipos para gozar de los beneficios de la fotosíntesis durante las 24 horas del día.
Incrementan la humedad del aire. Las plantas generan humedad y contribuyen a hidratar nuestras mucosas, garganta y piel e impiden las irritaciones que provocan los ambientes secos.
Aminoran el ruido. Se puede decir que "ahogan los sonidos", sobre todo en lugares cerrados y con suelos duros. Cuanto más fuerte es el sonido más se nota.
Mejoran el ánimo y el bienestar. Tener plantas en casa tiene efectos psicológicos y anímicos positivos que se producen con sólo contemplarlas u olerlas, tal y como aseguran la cromoterapia y la aromaterapia. Reducen el estrés, relajan y animan. Incrementan el nivel de concentración y mitigan sentimientos negativos como el miedo o el enfado, por lo que mejora el rendimiento en el trabajo o la recuperación de los enfermos.
Como muestra, el patio del antiguo hospital psiquiátrico (hoy centro cultural) de Arles donde estuvo ingresado Van Gogh. Pintó un cuadro con la vista que tenía desde su habitación y, además, escribió a su hermano admirado por la belleza de las flores y plantas que había en él. Allí mejoró mucho aunque luego de poco le sirvió!!!
Decoran tu hogar. Hace unos dos siglos, durante la Inglaterra victoriana, se puso de moda introducir especies tropicales y subtropicales en el interior de las viviendas. Hoy en día son imprescindibles para dar sensación de hogar, de casa vivida.
Purifican el aire y combaten la polución. Acaban con el humo, algunos microorganismos patógenos y captan el polvo, reduciendo su presencia en el aire hasta un 20%.
Pero no sólo estamos expuestos a humo y polvo… en muchas ocasiones lo estamos a productos tóxicos.
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La web francesa Plantes depolluantes nos propone hasta 31 plantas que nos ayudarán a contrarrestar los efectos contaminantes de estos productos tóxicos y algunos más, como las ondas electromagnéticas o el monóxido de carbono. Es el llamado proceso de “bioépuration” (purificación mediante plantas). Estas purifican el aire transformando o guardando en sus células los productos químicos tóxicos. Pero, aunque descompongan multitud de agentes contaminantes, hay que tener cuidado con animales y niños porque algunas de ellas son tóxicas a su vez!!!
Aparte del uso de plantas, te recomiendo que pruebes los productos ecológicos de limpieza que venden en grandes superficies. Concretamente, me encanta el multiusos de lavanda de Froggy (no me llevo comisión!!). No son más caros que los "normales", limpian bien y estarás aportando tu granito de arena a la salud del planeta.
Las mejores contra el formaldehído son el aloe, cinta, filodendro, tronco del Brasil y ficus benjamina.
Contra el benceno: hiedra, espatifilo, drácena de hoja fina, drácena rayada, poto.
Contra el tricloroetileno: espatifilo, drácena rayada, drácena de hoja fina.
Contra las ondas electromagnéticas: cactus, crásula.
Contra el monóxido de carbono: cinta, poto.
Contra el amoníaco: anturios, azaleas, crisantemos.
Por si te interesa, ésta es la lista con todas las plantas antipolución (por orden alfabético del nombre científico):
Aglaonema
Por si te interesa, ésta es la lista con todas las plantas antipolución (por orden alfabético del nombre científico):
Country Homes &Interiors |
Aloe (Aloe helenae)
Anturio
Azalea
Cactus (Cereus peruvianus)
Cinta (Chlorophytum comosum)
Crisantemo (Chrysantemum morifolium)
Crásula o árbol de jade (Crassula ovata)
Crotón
Ciclamen
Tronco del Brasil (Dracaena Fragrans)
Drácena lisa (Dracaena Janet Craig)
Drácena de hoja fina (Dracaena Marginata)
Drácena rayada (Dracaena Warneckii)
Ficus benjamina
Ficus de hoja grande (Ficus elastica)
Margarita africana (Gerbera Jamesonii)
Helecho rizado de Boston (Nephrolepsis exaltata bostoniensis)
Kentia
Hiedra (Hedera helix)
Orquídea (Phalaenopsis spp.)
Palmera de salón (Chamaedorea elegans)
Filodendro (Philodendron scandens)
Filodendro paraguayo (Philodendron selloum)
Poto
Palmera enana (Phoenix roebelenii)
Rapis o palmerita china (Rhapis excelsa)
Sanseviera o lengua de tigre (Sansevieria trifasciata)
Cheflera (Schefflera actinophylla)
Espatifilo
Singonio
PRÓXIMA CITA: AGENDA DE FEBRERO (01/02/2012)